No habrá UNA gran feria, pero esperamos MUCHAS pequeñas
Desde hace dos años, y bajo el contexto histórico de la pandemia causada por el Covid-19, la ESA (Entertainment Software Association) decidió, al igual que otras asociaciones a lo ancho y largo del globo, que hasta que no se pueda asegurar la salud de todos los visitantes, la feria no sería de manera presencial. Este hecho produjo que en 2020 no se celebrara la feria, puesto que la pandemia habría explotado en importancia dos meses antes y para 2021 con la situación más "normalizada" se decidió por un enfoque online. Parecía que este año iba a llevar la misma dinámica, así era hasta ayer, día en el que saltó la noticia cuando la ESA confirmó lo que temíamos:
Dedicaremos toda nuestra energía y recursos a ofrecer una experiencia E3 física y digital revitalizada el próximo verano. Ya sea que se disfrute desde el centro de exhibición o desde sus dispositivos favoritos, el escaparate de 2023 reunirá a la comunidad, los medios y la industria en un formato completamente nuevo y una experiencia interactiva. Esperamos presentar el E3 a los fans de todo el mundo en un evento en vivo desde Los Ángeles en 2023.
Y es que esta noticia era algo esperable, ya que la organización había comentado con anterioridad que continuaban las preocupaciones por los riesgos sanitarios, cuando en enero ya informaron sus planes de continuar con un modelo digital por el aumento de contagios de Covid-19, y también es posible que se haya sumado la tensión global por la guerra en Ucrania.
También es cierto que el escaparate y las oportunidades de negocio que brindan a las compañías, sobre todo las medianas y pequeñas, la visibilidad de un E3 son inigualables pero, actualmente, el público a base de "no tener otra opción" por la pandemia, se han habituado a estar atentos a muchos y pequeños anuncios de estudios independiente o de las compañías detrás de las distintas consolas, además de a otras grandes ferias como la Summer Game Fest.
El E3 como conjunción de distintas estrellas hace tiempo que ha sido superado y esta es una oportunidad para que los grandes anuncios de verano, puedan ser distribuidos de manera más óptima y no acotados al calendario de la feria. Tenemos a Microsoft con su Xbox Games Showcase, PlayStation con sus State of Play y Nintendo con sus Direct. Y a todo eso hay que sumarles todos los estudios que tenían su representación y que han guardado sus anuncios para esos días, con material para mostrar a su propia manera.
Es cierto que hemos perdido este año parte de la ilusión que nos da brinda esta "Fiesta de los Videojuegos" tan necesaria para recargar la batería del hype, pero hemos ganado en pequeñas dosis y con suerte con mucho menos humo.
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